INICIO | CONTACTO

BÚSQUEDA RÁPIDA DE RECURSOS
 
   
     
 

¡UNA PROFESIÓN CON CERO DESEMPLEO!
POR KERRY A. OLSON


Recientemente la crisis financiera global ha llegado a niveles nunca antes vistos por las naciones industrializadas, casi todos los países han experimentado un aumento considerable en el desempleo, y muchos han perdido casi la mitad de sus ahorros. Mientras en el mundo la gente está afanada por retener lo que tienen, Dios sigue buscando gente dispuesta a entregarle todo, dando sus vidas por la expansión de su reino.

Al servir a Dios por más de la mitad de mi vida como misionero/movilizador de misioneros latinos, puedo decir con autoridad que ¡NO hay desempleo en las misiones! Pero no tome mi palabra solamente, Jesús decía a sus discípulos hace más de 2000 años que “La mies es mucha, más los obreros son pocos…”. El contexto de esta declaración fue (Mateo 9:36). Al parecer según Mateo 9 es una verdad espiritual que siempre tendremos presente. Me toca cada año visitar a misioneros en diferentes partes del mundo y sin excepción alguna hay una tremenda falta de obreros. No importa donde esté; en una de las grandes ciudades de Asia o en medio del desierto en el Norte de África, el clamor de los pocos obreros que están ahí, es la misma, “¡Mándanos más obreros!”

¿CÓMO ENVIAR MÁS OBREROS?
¡Clamar al Señor!


“Rogarle al Señor que envíe obreros a sus mies.” - Mateo 9:38

En pocas ocasiones, Jesús nos dice o nos enseña por cuales cosas debemos orar. Aquí no solamente nos dice o nos pide que oremos por más obreros, sino que usa la palabra “rogar”. “Te ruego” quiere decir ¡te imploro! Jesús nos exhorta a que estemos clamándole a que salgan obreros a su mies.

Joy Dawson de Juventud Con Una Misión ha dicho que “No orar, es un pecado de orgullo, porque es pensar que podemos lograr algo sin Dios.”

¿Cuántos cristianos realmente entienden este principio y están activamente clamándole a Dios que envíe más obreros al campo? Temo que hay mucho orgullo y autosuficiencia dentro del cuerpo de Cristo. Se encuentran haciendo mil cosas dentro de las cuatro paredes de la iglesia, pero se han olvidado de los millones y millones allá afuera que aún no han escuchado el evangelio y no escucharán a menos que uno esté intercediendo para que Dios envié más obreros a sus mies.

Lo interesante de la oración es que muchas veces nos convertimos en las respuestas de nuestras propias oraciones. Así como alguien ha dicho, “Cuidado, porque si realmente estás pidiéndole al Señor de la mies que envié obreros a sus mies, tal vez lo que escucharás será: “¡Ve tú!”

¡Ver correctamente!

¿Estás viendo? ¿Tienes tus ojos espirituales y naturales abiertos al mundo que te rodea? Jesús en otra ocasión nos habló de la necesidad de “alzar nuestros ojos porque la cosecha ya esta lista” (Juan 4:35-36). Esto me habla de quitar nuestros ojos de nosotros mismos y no ser egoístas. George Otis Jr. decía que “sólo tendremos éxito en la vida en la medida en que estemos dispuestos a identificarnos con la visión y el corazón del Señor Jesucristo.” Jesús decía que “quien quiera salvar su vida, la perderá, pero quien pierde su vida por su causa, la salvará.” (Lucas 17:33)

Jesús vino a salvar lo que se había perdido. El propósito y la estrategia de Dios no ha cambiado a través de los siglos. Él no desea que ninguno se pierda, sino que todos procedan al arrepentimiento (2 Pedro 3:19). Al ver nuestro mundo hoy, es evidente que su voluntad no se está haciendo y la iglesia tiene la culpa. Millares de almas se pierden a diario y nosotros somos los responsables.

El cantante Keith Green decía hace muchos años “que esta generación de cristianos es responsable por esta generación de almas” Dios no nos va pedir cuentas por los que ya murieron, ni por los que todavía no han nacido, pero si nos va pedir cuentas por nuestra propia generación. Keith también decía en uno de sus cantos “Jesús dijo id, la excepción debe ser quedarse.” ¿Será que muchos de los “discípulos” de Jesucristo hoy no están identificándose con su visión y corazón para las multitudes? Temo que la gran mayoría se preocupan más por su propio bienestar, sus ahorros en el banco, su pensión del trabajo y patrimonio, sin preocuparse por lo que le interesa a Dios mismo.

Gran parte de la respuesta de ver más obreros saliendo a la mies es por tener los “ojos alzados”, es decir, tener la perspectiva correcta, la de Dios, quitando el enfoque sobre nosotros y volteando a un mundo que nos necesita, dándonos cuenta de que Dios nos necesita también para llevar acabo su voluntad en la tierra. Dios quiere usar mi vida, Dios quiere usar tu vida para cumplir sus propósitos, ¡Sin Dios no podemos, sin nosotros Dios no lo hará!

¡Ten compasión!

Al ver las multitudes como Dios las ve, no podemos evitar ser conmovidos a compasión, porque el Espíritu Santo de Dios reside dentro de nosotros. Compasión implica acción. Compasión sin acción es como ver un edificio en llamas y sentir lástima por la gente atrapada en él, pero quedarnos donde estamos, sin hacer nada. ¡La compasión requiere acción!

Toda la Biblia revela a un Dios lleno de compasión. Jesús vez tras vez al ver las multitudes (Mateo 9:36; 14:14; 15:32; 20:34, Marcos 1:41; 6:34, 8:2) tuvo compasión y la expresó en acción, sanando a los enfermos, restaurando la vista a los ciegos, expulsando a los demonios, supliendo comida para una multitud y hasta levantando a un muerto (Lucas 7:13).

1 de Juan 3:17 nos enseña que es cuestionable que uno tenga el amor de Dios si no expresa compasión. Judas 1:22 dice que la compasión hace una diferencia. ¿Estás haciendo una diferencia en tu mundo?

Bob Pierce de Visión Mundial decía, “Deja que mi corazón se quebrante, por la mismas cosas que quebrantan el corazón de Dios.” Otra vez, el problema es nuestro egoísmo, nuestros ojos fijados en nosotros mismos un enfoque sumamente humanista, un enfoque equivocado.

Conclusión

Al ver las multitudes, Jesús tuvo compasión de ellas, porque estaban agobiadas y desamparadas, como ovejas sin pastor. <<La cosecha es abundante, pero son pocos los obreros – les dijo a sus discípulos-. Pídanle, por tanto, al Señor de la cosecha que envíe obreros a su campo.>>
- Mateo 9:36-38

La estrategia de Dios para terminar la evangelización del mundo no ha cambiado a través de los siglos, el envío obreros a sus mies. La necesidad de más obreros es urgente y aun más hoy en día porque creo que estamos en los últimos días y nos debe hacer dejar el testimonio a todas las naciones (etnos en griego) y luego vendrá el fin (Mateo 24:14).

Si estas buscando un “trabajo”, una profesión en la cual vale la pena entregar tu vida porque se trata de eternidad y quieres ser estratégico, acepta el reto de trabajar donde el trabajo es más abundante y donde hay menos obreros.

Un lado de la moneda es que es indispensable y crucial que sepas que es Dios quien te está enviando al campo porque es la única cosa que te mantendrá ahí en los momentos difíciles. El otro lado es como alguien ha dicho, “quien tiene un versículo (o varios) <<id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura>> no necesita un llamado.” El llamado ya fue dado.

Mientras hay verdad en las dos declaraciones, la actual falta de obreros en el campo misionero no es porque la gente no ha sido llamada, o no ha entendido el mandato bíblico, sino porque quieren vivir sus vidas como ellos desean y simplemente no han consultado a Dios sobre el asunto.

Recuerde que hay y siempre habrá una profesión con cero desempleo. ¡No hay desempleo en las Misiones! Así que, ten los ojos abiertos, sé lleno de compasión, clámale al Señor de la mies que envié obreros a su campo y ¡ten cuidado porque tal vez él te llamará a servirle en su campo!


Click aquí para leer este artículo en inglés.

Click aquí para leer este artículo en portugués.

 

Artículos recomendados





¡Una profesión con cero desempleo!

por Kerry Olson
Recientemente la crisis financiara global ha llegado a niveles nunca antes vistos por las naciones industrializadas, casi todos los países han experimentado un aumento considerable en el desempleo… Ir al artículo completo




¿Es cierto que cada cristiano es un misionero?
por Gordon Olson
Comúnmente escuchamos decir que cada cristiano es un misionero, o más bien, que cada cristiano debería ser misionero. Incluso, hay una conocida frase que dice: “Cada día ¡sé un misionero!” Mmm... Suena bien, pero este tipo de pensamiento efusivo sólo empaña el asunto.… Ir al artículo completo

 
         
 
 
IDPORTODOELMUNDO.COM © 2009 / CONDICIONES DE USO / SITIO DESARROLLADO POR